miércoles, 10 de diciembre de 2008

Ohhhh, Navidad

La navidad es una época en la que compartir, en la que todos nos acordamos mas de nuestros familiares, en la que intentamos que aunque sea por un ratito sean un poco mas felices y con un detalle nuestra presencia se sientan alagados o llenos.
La navidad es una estación de año en la que hay mucho frío, y necesitamos más que nunca el calor de los nuestros, para mi la navidad no son regalos, es una época conmemorativa, con la excusa perfecta para permanecer mas tiempo al lado de los nuestros.
Según desde el punto de vista que se vea, pero para mi la navidad es una época especial, vemos a los niños ilusionados llenos de alegría, contándote, que le van a pedir a los reyes magos o a papá Noel, esa inocencia es algo único, que parece que se va agotando a medida que pasan los años, y nosotros los mayores tenemos que luchar por que eso nunca acabe ni se destruya, la inocencia y el desconocimiento es algo bonito, bueno, y con lo que los niños son felices, se emocionan viven experiencias únicas, que recordaran el resto de sus vidas.
Debemos ser concientes también del despilfarro que se hace cada año, hay que ser consecuentes con lo que nuestro querido Papa Noel, o Melchor, Gaspar y Baltasar, traen a nuestros pequeños, hay que lograr el equilibrio, es decir, que no sean tacaños pero que también sean conscientes de los miles de niños que no pueden tener unos regalos como ellos se merecen.
Por otro lado hay que destacar que nos encontramos en una época difícil, ya que la economía mundial no es que este precisamente en alza, pero siempre se puede hacer algo, lo más importante son los niños, fuente de nuestras alegrías, y saber que con cada cosa, despertarás una sonrisa, eso es algo grande e irrepetible, algo que como madre padre o reyes magos, estaremos haciendo y contribuyendo para un mundo mejor.
Quiero fomentar con esta opinión, no las preocupaciones, ni los problemas, ni siquiera la desesperación, hay que ser realista y sabemos que hay momentos muy difíciles, pero de los momentos difíciles hay que sacar la pulpa, la esencia, lo profundo, lo mágico, hay que sentir alegría y no tristezas, hay que poner un alto en el camino y recordar a los que ya no están, pero no amargarse por ello, si no disfrutar, ya que los que no están no se pondrían nada contentos al saber que desaprovechamos nuestra propia vida lamentándonos, y que resurgir de las cenizas, y ver el lado bueno, compartir todos los momentos buenos, hasta no poder más. Mi mensaje claro, es que hoy estamos aquí mañana no sabremos, compartan con sus familiares, bésenlos y decirles cuando les quereis, porque eso siempre se quedará grabado en el corazón de cada uno de ellos.